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viernes, mayo 18, 2007

CAMPIONI DI COPPA

Primer título de uno de mis equipos desde que tengo el blog. Espero que no sea el último. Desde la Supercopa Italiana del 2002 no ganábamos nada. Y desde el 1991 sin la Copa Italia. Ahí va la octava. Grazie Roma.






miércoles, mayo 09, 2007

QUIERO GANAR SIEMPRE

Mucho se ha hablado del Atlético-Barcelona del 20 de Mayo con respecto al Madrid. Seré breve: me imaginé a mi equipo jugándose la UEFA (y sin jugársela) y con posibilidad de dar la liga al eterno rival. Sin pensármelo dos veces decidí que mi equipo tenía que perder aquel partido. Me imaginaba que toda la lucha de una temporada habría merecido la pena por evitar que el vecino conquistara el título. Me imaginé regresando a casa, resoplando aliviado porque habíamos fastidiado la liga al equipo que más odiaba. Pasé por el hall, me miré en el espejo y me vi delante con la camiseta de un equipo al que había deseado la derrota, pensando que a muchos kilómetros miles de personas estaban felices. Pensé todo lo que había hecho y dicho durante aquel día. Me sentí un perdedor.

miércoles, mayo 02, 2007

4 MAGGIO: CIAO, GRANDE TORO

"Los héroes son siempre inmortales ante los ojos de quien en ellos cree. Así los muchachos creerán que el Torino no ha muerto, está solo jugando de visita".

No hay frase mejor que resuma la historia del gran Toro. Ese que allá por la década de los 40 rozó con los dedos el cielo besando la gloria del fútbol transalpino. Elevó su fútbol hasta el verdadero azote de la vida, derrochando juego por toda la península itálica, cuando los límites de la posterior Copa de Europa terminaban en el país de cada cual. Batieron todos los récords, llevaron a la azurra diez titulares sobre el total de once, lograron cuatro campeonatos consecutivos. Y le tenían a él: Il Capitano Valentino, grande entre los grandes. Cuentan que cuando el Toro flojeaba, Valentino Mazzola subia al medio campo, se arremangaba y gritaba: ¡alé! . Todo cambiaba. El terreno se volvia granata, el balón guiñaba cómplice, y la victoria estaba asegurada.




Realmente fueron héroes. Héroes de un fútbol mágico, romántico, elegante. Con una alineación que entre los viejos del lugar se recitaba de memoria: Bacigalupo, Ballarín, Maroso, Grezar, Castigliano, Rigamonti, Gabetto, Menti, Loik, Mazzola y Ossola. Los invencibles. En realidad eran un grupo de amigos, grandes amigos, que cada Domingo se reunían para viajar en el autobús del club, 'Il Conte Rosso' a repartir por el terreno de juego toda su clase. Cada cual tenía su propio oficio mediante el cual subsistían, y como afición eran fútbolistas. Escribiendo las páginas doradas de la leyenda del club con más seguidores en Turín.



Pero la vida es maldita y quizás alguno pudiera pensar que un final feliz es una historia inacabada. El 4 de Mayo del 49, regresando de Lisboa, la historia del Torino se convertía en leyenda. Llegando a Turin, sobre la basílica del monte Superga, se rompía el mejor equipo del momento. El fútbol perdía un trozito de sí mismo. El Torino caia con su avión, tiñiendo el azul de granate, destrozando en lágrimas a toda una ciudad.

Desde entonces hasta ahora todo ha sido un camino de piedras a la sombra de la magna Juve, que cubría en triunfos sus artimañas. Pero la gloria regresará, bañando el futuro con luz del pasado. Yo sé que cada Domingo los chicos pelotean allá en lo alto. Por si acaso, el poeta nos da la solución: Si miras a lo alto algo consuela; saber que el mejor Toro, vuela.